6 mágicos juegos de Navidad para enseñar a los niños a ser solidarios

La Navidad es un tiempo que invita a emociones cálidas y expansivas que espontáneamente queremos compartir. Aunque lo deseable es que estos buenos deseos y emociones duren todo el año, no debemos dejar pasar la oportunidad de trabajar con nuestros niños estos valores tan importantes para su desarrollo actual y futuro. Por tanto, aprovechemos el tiempo navideño que además es un tiempo de vacaciones escolares para educar en solidaridad.

1. Collage solidario

La actividad consiste en hacer un collage con el niño sobre la vivencia de la Navidad en otros países, culturas y/o religiones. Se trata de buscar en revistas o en Internet fotos que reflejen las costumbres típicas de esta celebración a través del mundo. También pueden dibujar aquello que sientan como más representativo de la Navidad después de habérselo explicado o leído juntos o recortar y pegar ropas, atributos y objetos representativos en cada caso y buscar información de todo ello.

2. Galletas con mensajes personalizados

Una de las actividades preferidas por los niños es cocinar. Les encanta dar rienda suelta a su imaginación creando galletas navideñas que luego pueden compartir y disfrutar. En este caso se trata de galletas muy especiales porque son galletas personalizadas, tanto la forma como el mensaje que llevará dentro. Lo interesante de la actividad es dedicar un tiempo previo a pensar en las personas a las que vamos a dedicar y regalar nuestras galletas: al abuelo, a la vecina, al primo, a la profesora… Cada galleta será especial para esa persona e incluirá un mensaje solidario, que le trasmita a esa persona nuestro afecto, nuestra palabra de apoyo, de admiración, de gratitud; emociones bonitas regaladas a personas significativas para los pequeños.

3. Diseño de postales

Se trata de diseñar y crear sus propias postales navideñas. Tendremos que preparar todo el material de manualidades como cartulinas, papeles de colores, pegamento… ¡y mucha purpurina! Los niños crearán los diseños que más les gusten pensando en las personas a las que van a enviarle cada postal. Una vez hecha la tarjeta escribirán, con nuestra ayuda, un buen deseo para esa persona, algo que sepan que es importante para el amigo o familiar al que dirijan su postal. Por ejemplo: ‘abuelo, deseo que este año sea para ti muy feliz y que podamos disfrutar este verano en el pueblo’, ‘querido amigo, este año ha sido un poco duro por la pérdida de tu abuelita pero este nuevo año el sol va a brillar para ti y yo estaré a tu lado, lo vamos a pasar muy bien’.

4. Donar juguetes

Durante la Navidad es habitual que muchas ONGs preparen campañas de recogida de juguetes para hacerlos llegar a colectivos desfavorecidos. La propuesta consiste en explicarles a los niños la labor de estas entidades, elegir una y preparar una donación. Ellos harán la selección de los juguetes que desean dar, los prepararan; los limpiarán, se asegurarán de que están todas las piezas y de que están listos para ser disfrutados por otros niños. Es importante ayudarles a tomar conciencia de que es un acto de solidaridad compartir con los demás, sería interesante de hecho que seleccionarán no solo los juguetes que ya no usen, sino alguno al que tengan especial cariño o lo tengan en pleno uso para sentir verdaderamente la experiencia de DAR; no dar lo que nos sobra, sino también aprender a desprenderse de aquello que nos cuesta un poco más.

5. Llevar alimentos a un banco de alimentos

Es muy frecuente en Navidad que distintas organizaciones organicen campañas de recogida de alimentos. A veces les vemos durante esos días en los supermercados recogiendo directamente las donaciones. Explicaremos a los niños en qué consiste un banco de alimentos y haremos una donación de productos no perecederos. Los niños colaborarán en todo el proceso tomando conciencia de la importancia de ser solidarios y compartir, así como de las necesidades de muchas personas.

6. El árbol de Navidad de los buenos deseos

El árbol de Navidad es algo que no falta en ninguna casa durante esos días. Probablemente sea el símbolo más significativo de estas fechas, siendo un clásico decorar el árbol con los niños. La propuesta es añadir a la magia del árbol mensajes con forma de corazón para todos los miembros de la familia y/o amigos con los que vamos a compartir los momentos más señalados. Así, además de las bolas, las piñas, las guirnaldas… Los niños colgarán corazones en los que por un lado escribirán el nombre del destinatario del mensaje y por el otro el mensaje. También puede hacerse con mensajes genéricos que sean buenos deseos lanzados al Universo.

¡Feliz y solidaria Navidad!

Fuente: https://www.guiainfantil.com/